Desde 2021, las bibliotecas y escuelas de Estados Unidos están sufriendo una oleada irrefrenable de casos de censura literaria.
Tal y como señala Pen America, la organización sin ánimo de lucro que defiende la libertad de expresión y los derechos humanos a través de la literatura, las prohibiciones de libros no son casos aislados, sino que afectan a estados enteros y son fruto del esfuerzo organizado de diferentes grupos de presión —principalmente conservadores y grupos extremistas religiosos— para limitar el acceso a ciertas historias, perspectivas e información.
Estas restricciones están amparadas por la ley en algunos estados como Florida, Utah o Misuri, que a lo largo de estos años han estado implementando legislación que controla la difusión de libros que tratan, principalmente, sobre racismo, sexualidad y temas LGBTIQ+. También se está limitando el acceso a títulos que abordan tópicos sensibles como la violencia, la muerte, el abuso, la salud mental, el bullying, el suicidio, la drogadicción o la salud sexual, entre muchos otros.
Frente a esta falta de libertad, se están llevando a cabo numerosas iniciativas. Por ejemplo, Illinois se convirtió en el primer estado en prohibir las leyes de censura gracias a su secretario Alexi Giannoulias, que propuso con éxito que se retirasen fondos estatales a las bibliotecas públicas y escuelas censoras. Asimismo, a modo de reivindicación, algunos jóvenes han creado clubs de lectura dedicados exclusivamente a leer libros prohibidos. También llama la atención cómo han respondido a la censura autores como Margaret Atwood, que subastó una versión resistente al fuego de El cuento de la criada, uno de los tantos títulos afectados; los beneficios obtenidos los destinó a la asociación Pen America para apoyarla en su lucha.
Libros prohibidos en el país de América del Norte
Son innumerables los libros censurados en este país de Norteamérica desde 2021; por ello, te presentamos solo algunos de los más importantes, los 10 títulos que más se prohibieron durante 2023 según la American Library Association (ALA).
Gender Queer
Gender Queer de Maia Kobabe —traducido como Género Queer— ocupa el primer puesto del listado, ya que su presencia en escuelas y bibliotecas fue puesta en duda en 106 ocasiones. Se trata de una autobiografía en la que se narra la trayectoria de Kobabe hasta el descubrimiento de su identidad de género y sexualidad. Lo que ha motivado su censura es su contenido LGBTIQ+ y sus imágenes sexualmente explícitas.
All Boys Aren’t Blue
El segundo libro más perseguido en 2023 fue All Boys Aren’t Blue (No todos los chicos son azules) de George M. Johnson, que acumuló 82 prohibiciones. Descrito como «unas memorias-manifiesto», la obra reúne ensayos de Johnson donde describe su experiencia creciendo en Nueva Jersey como persona queer y negra. Los motivos de su censura son su temática LGBTIQ+ y su contenido sexualmente explícito.
This Book Is Gay
Prohibido 71 veces, This Book Is Gay (Este libro es gay), de James Dawson, ocupa el tercer puesto de libros más censurados en Estados Unidos durante 2023. Estamos ante un título divulgativo que trata sobre la realidad de ser gay, lesbiana, transgénero, bisexual, intersexual, asexual, queer… Entre sus páginas se incluyen historias y entrevistas a niños, adolescentes y adultos de la comunidad LGBTIQ+. Se prohibió por las mismas razones que los dos libros anteriores y, además, por considerarse de educación sexual.
The Perks of Being a Wallflower
Otro libro visto con malos ojos por los grupos censores fue The Perks of Being a Wallflower (Las ventajas de ser un marginado), de Stephen Chbosky. Atacado en 68 ocasiones, presenta a Charlie, un adolescente de 15 años cuyo mejor amigo se suicidó. A punto de comenzar la universidad, conoce a Sam y Patrick, junto a quienes transitará el camino hacia la adultez. Los motivos tras su censura son su contenido sexualmente explícito, su temática LGBTIQ+ y su tratado de tópicos como la violación o el abuso de drogas.
Flamer
La novela gráfica Flamer (Incendiario en español), de Mike Curato, fue prohibida 67 veces y, debido a ello, es el quinto libro más prohibido de Estados Unidos en 2023. Es una semiautobiografía en la que el autor narra lo que supuso crecer siendo un chico gay y católico, teniendo que contener y suprimir sus sentimientos y actuar más masculino frente a otros chicos. Comparte con los libros anteriores haber sido prohibido por su contenido LGBTIQ+ y por ser sexualmente explícito.
The Bluest Eye
The Bluest Eye (Ojos azules), de Toni Morrison, ocupa el puesto número 6, acumulando en su haber 62 prohibiciones. La novela narra la historia de una chica negra que se considera fea y piensa que sería mucho más guapa si tuviera los ojos azules. La trama contiene multitud de temas sensibles, entre los que se han destacado la violación, el incesto y que es sexualmente explícito como los motivos de censura.
Me and Earl and the Dying Girl
El séptimo/octavo lugar —se encuentra en situación de empate con el siguiente libro— le corresponde a Me and Earl and the Dying Girl (Un final para Rachel), de Jesse Andrews, que fue prohibido en 56 ocasiones. El libro aborda la amistad de dos adolescentes, Earl y Greg, con Rachel, una chica que padece leucemia. En el volumen los grupos censores han detectado contenido sexualmente explícito, blasfemia y tratamiento de tópicos como la muerte y las drogas.
Tricks
Tricks, de Ellen Hopkins, obra que no está traducida al español, también contó en 2023 con 56 prohibiciones, lo que la sitúa en la misma posición que Un final para Rachel. Esta novela está relatada en la voz de cinco adolescentes que se prostituyen por diferentes razones. Los temas que han alentado su censura son la prostitución, el suicidio, la sexualidad, las cuestiones de género y la mención a la religión.
Let’s Talk About It
Let’s Talk About It, de Erika Moen y Matthew Nolan, es una guía sobre la adolescencia, donde se abordan tópicos como el sexo, las relaciones y la construcción de la identidad. Este ensayo, que fue vetado 55 veces en Estados Unidos, fue prohibido por tratar sobre educación sexual, contener temática LGBTIQ+ y por ser sexualmente explícito.
Sold
El décimo libro más atacado en Estados Unidos en 2023 fue Sold (Vendida), de Patricia McCormick. Entre sus páginas se narra la historia de una joven de Nepal a la que venden como esclava sexual. Prohibida en 53 ocasiones, lo que se persigue de esta obra es su tratamiento de temas como la violación y tópicos de índole sexual.
Censura literaria en la historia: un instrumento para controlar la información e imponer valores e ideologías
La censura literaria no es un fenómeno nuevo, sino que existe desde que el hombre aprendió a escribir. A través de los libros se pueden transmitir muchos conocimientos y, la información, cuando un país pretende que su población sea ignorante y maleable, puede ser muy peligrosa. No hay mejor reflejo de ello que la trama de 1984 de George Orwell, que pese a ser escrita hace tanto tiempo, año a año sigue demostrando su vigencia.
Prohibir libros ha sido la forma en la que, históricamente, se ha intentado imponer ideas y manipular la mentalidad colectiva; de este modo, controlando el tipo de obras que veían la luz, quienes estaban en el poder eran capaces de difundir sus propias ideologías, relegando al olvido aquellas posturas que no se ajustaban a su régimen. También han sido objeto de censura los volúmenes que trataban temas que no se consideraban aceptables, es decir, tópicos que se rebelaban contra la cultura o religión del país.
Uno de los métodos de censura más utilizados para limitar la libertad de expresión fue la quema de bibliotecas y de libros; una fecha muy representativa de esta última práctica fue el 10 de mayo de 1933, día en que los ciudadanos alemanes presenciaron cómo profesores y estudiantes entraron en universidades, bibliotecas y librerías para retirar libros que luego quemarían en hogueras públicas.
Asimismo, se cuentan entre las formas de censurar literatura el secuestro de ejemplares o la persecución de escritores con tal de limitar su libertad de expresión. En los últimos años, son notables casos como el de Sergio Ramírez, nicaragüense cuyo libro Tongolele no sabía bailar fue retenido en la aduana del país que, posteriormente, emitió una orden de detención contra el autor por conspirar y le retiró su nacionalidad. También destaca el ataque que sufrió Salman Rushdie en 2022, que le arrebató la visión en un ojo y casi le cuesta la vida; el autor llevaba años perseguido después de que un ayatolá iraní emitiera una fatwa condenándolo a muerte a raíz de la publicación de Los versos satánicos, considerada ofensiva para el Islam.