Se trata del Bar Plaza Dorrego, en San Telmo, que cerró sus puertas en 2019.
Cerrado con anterioridad a la pandemia que marcó un antes y un después en todo el mundo, este local declarado Bar Notable en 2004, piensa volver a deleitar a sus clientes con su centenaria infraestructura.
«El edificio fue construido alrededor del año 1880 con dos plantas. Es arquitectónicamente de aire italianizante y fue conocido como los Altos del Besio, porque su propietario originalmente tenía en la planta baja un almacén de ramos generales con despacho de bebidas», explica Horacio Spinetto, integrante de la comisión de Cafés Notables.
Ubicado frente a la Plaza Dorrego, entre las calles Defensa y Humberto Primo, desde hace 143 años este bar vio pasar por sus instalaciones a referentes de la cultura porteña. Entre ellos se encuentran Jorge Luis Borges y Ernesto Sabato, quienes en 1975 lo eligieron como el café de su reencuentro, tras años de distanciamiento.
Este año, fue sede de la Noche de los Bares Notables, cuando anticipó su reapertura, aunque sin fecha definitiva. Por el momento, los dueños se encuentran llevando a cabo los arreglos pertinentes que, posiblemente, durarían entre seis y ocho meses. La idea es ofrecer una nueva propuesta gastronómica.
«El bar nunca tuvo cocina. De hecho, los bares viejos no tenían, porque no daban comida, hacían un tostadito, un cafecito, solo cocinaban con un tostador y una hornalla. Ahora vamos a instalar una cocina», anticipó Pablo Durán, uno de los integrantes de la sociedad que se hizo cargo del lugar.
Luego de una larga lucha, el bar debió cerrar sus puertas en 2019, sin embargo, en 2021 lograron que la Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Bienes Históricos le otorgara el certificado que lo declara como Bien de Interés Histórico Nacional.
Pronto tendremos un nuevo bar para sentarnos a disfrutar de una buena lectura junto con un café.